Quienes Somos

Peace and Hope es una fundación constituida en el año 2001, cuyo objetivo es proporcionar ayuda económica, técnica, profesional y humanitaria en aras del desarrollo social y bienestar general de la población colombiana. En particular, la Fundación da énfasis a la promoción y apoyo a la expansión de cobertura y mejora de la calidad de la educación de la población infantil y juvenil en Colombia mediante programas de becas para estudios y otros programas que tiendan a obtener tales fines.

 

Con la contribución de varios amigos y personas que han creído en esta, la fundación ha logrado recaudar e invertir importantes sumas destinadas a la construcción de obras de infraestructura, un pabellón para salas de quimioterapia, parques, tratamientos médicos, útiles escolares, viajes de recreación y otras ayudas a fundaciones dedicadas al tratamiento de niños enfermos con cáncer y leucemia y otras enfocadas en la educación, como Sanar, Fé y Alegría, Hogar Siervas de Jesús, Proyecto Alma de Niño, Hogar Santa Helena, entre otras.

Dentro de los programas de la fundación, en el año 2008 se creó un programa de becas para beneficiar a jóvenes destacados académicamente pero sin los recursos para adelantar estudios universitarios. Este programa ha sido bautizado con el nombre de Rafael Eduardo “Toto” Anaya Zambrano, quien falleció a los 26 años como consecuencia del atentado terrorista al Club El Nogal en Bogotá, en febrero de 2003. Toto fue un mártir de la guerra que ha sido la principal causa de la pobreza y el subdesarrollo en Colombia, quien vio truncadas sus esperanzas de contribuir en vida al futuro de nuestro país, y especialmente a las causas de la fundación Peace and Hope, a la cual se había vinculado poco antes de morir. Por esta razón, queremos que él siga viviendo a través de esta causa para que su muerte no haya ocurrido en vano y contribuya de alguna forma a la anhelada paz de Colombia.

A marzo de 2018 podemos informar con orgullo que hay cuatro beneficiarios de las becas que han logrado cumplir su sueño de estudiar y graduarse de una carrera para cambiar sus vidas definitivamente y a su vez contribuir a crear un mejor país. A su vez, actualmente hay otros

cuatro beneficiados que están haciendo sus estudios universitarios para ser profesionales. Son jóvenes que han sido seleccionados por sus valores, logros académicos, intereses, liderazgo y compromiso, cualidades que han sobresalido también a lo largo de sus estudios en la universidad, donde se han destacado por su desempeño. Es así como cuatro de ellos, José Miguel Quintero Granados, Cesar Andrés
Ortiz, Geraldine España, Dayana Arévalo y Andrea Sandoval, recibieron sus grados como ingeniero electrónico y de telecomunicaciones,
ingeniero industrial, administradora de empresas y enfermera, respectivamente. Con estos logros estamos convencidos de que en alguna
medida se contribuirá a a construir la verdadera paz que necesita Colombia, a través de una movilidad social y otorgamiento de
oportunidades a quienes han carecido de ellas.

La fundación seguirá comprometida con Fabian Pérez, Isabella Negrete , Alberto Pineda y Sheila Soto, estudiantes becados en distintas carreras, así como con otros muchos que se espera beneficiar para multiplicar este mensaje de paz y solidaridad.